A partir de las reflexiones que Durkheim lleva a cabo en La División del Trabajo Social, podemos entender que un intento por desarrollar un concepto de sociedad es una tarea abordable a partir de la indagación sobre sus formas de integración. Siguiendo sus planteamientos, referirse sociológicamente a la integración es intentar conocer cómo una sociedad se reproduce a sí misma, a través de qué elementos se mantiene como una unidad, mediante qué dinámicas se llevan a cabo tales procesos, cuáles son los principales problemas o desafíos que debe afrontar. Un concepto técnico de sociedad aparece justamente en la segunda mitad del siglo XIX, para señalar las características distintivas del espacio social en que la integración social debe producirse.